14 agosto 2016
No sé cuantos días llevo sin escribir, ni cuanto hace de la intervención, pero voy recuperándome poco a poco. Ayer era el cumpleaños de Mónica, por eso sé que hoy es catorce. Felicidades, Moni. Te quiero.
Todo transcurre como estaba previsto, sólo ayer por la tarde parece que algo se complicó. Se me hinchó el brazo donde llevo la vía pero fue algo posicional.
Me siento privilegiada, por mi habitación han pasado muchos amigos y casi toda mi familia. Y no digamos el personal del hospital, es genial!
Anímicamente estoy bien. Sólo un momento de bajona y fue en un instante en que de repente mi castillo de naipes se vino abajo. Puro teatro.
Estoy torpe con la vista y la lengua, o la palabra, pero seguro que lo recuperaré. Es todo por el proceso y el tratamiento, será pasajero. Estoy segura.
Aquí las horas no pasan y el sueño cada vez aparece menos, pero la poca actividad no me pone a escribir. Hay momentos en los que a duras penas me deja pensar. No es una escritura ni ordenada ni inteligente,… creo que tendré que practicar mucho.
Me acaban de pasar visita. Dicen que llevo cuatro días desde la operación y todo anda dentro de lo normal. No sé cuanto me queda en el hospital. Espero que cada día de los que me quedan pueda ver y disfrutar de esa sonrisa que iluminó el quirófano. Gracias a todos.
Desde el Calvario 