24 mayo 2016
Hoy acabo las pastillas. Malditas pastillas. Sibilinas. Veneno silencioso y traicionero que me deja noqueada.
Llevo dos días con dolor de cabeza, nada alarmante, ni siquiera para tratarlo. Basta un poco de sofá. Luego bajaré a comer con Tere, “mi hermana”, pobreta, no sabe que más hacerme. Te quiero, lo sabes!
He de pensar definitivamente como estructurar la novela, (Última Barbarie), y en el texto para Paco, y en la web de ciudArte… Hoy lo hago.